lunes, 27 de septiembre de 2010

APRENDIZAJE

APRENDIZAJE.
Tuve que andar muchos cielos y reinventarme horizontes,
 Tuve que volver a esperar sola las mañanas,
Tuve que sentir el dolor implacable del frio de tu ausencia.
Tuve que aprender a beberme las lágrimas
y alimentarme de los vacíos que llenan la casa.
Aprendí a dar arrumacos a tus recuerdos
Tuve que ser el arena de las playas
donde quise dibujar otra vez tus pisadas
y seguirlas
para que me lleven donde tu mirada
No escatimé en amaneceres frente a la playa
No ahorré ni un beso y grité todas las palabras
No pasó una sola noche sin que te nombrara
Como un conjuro maléfico de oscuras magias...
No paso día que no te pensara
como plegaria sagrada para que regresaras...
Abrí todas las ventanas y las puertas
Me engañé pensando que estabas volviendo y
Tuve que aprender a beberme las lágrimas
Aprendí a alimentarme de tus vacíos
Rasgue con uñas y dientes las paredes
Envenené en alcohol esas noches largas
Tuve que aprender a vivir cómoda entre soledades
Tuve que aprender a olvidar tu nombre
y aún no te olvido...
Gabriela Palacios Olavarría


ADIÓS Y BUENAS NOCHES.

ADIÓS Y BUENAS
NOCHES.

Adiós y buenas noches.
Camino lentamente hacia el alba.
Ya no quiero permanecer en la obscuridad,
la luna se ha ocultado
negándose a iluminar el camino
que me llevara lejos de ti.
Pareciera que no quiere que te olvide,
pareciera que quiere que siga presa.
Presa de tus labios,
de tu cuerpo,
de tus caricias
y de tu pasión.
El Sol lentamente se asoma en el horizonte,
más sus rayos no me tocan
mi cuerpo se niega a calentarse con ellos
porque la noche no quiere abandonar más.
Mi alma cansada esta de sentir sólo el frío.
Anhela un poco de calor,
para vivir,
para reír,
para crecer,
para amar....
para escribir.
Mis letras huecas y vacías siento,
sin sentido ni razón de ser
buscando desesperadamente el verso,
el cual quedó muerto en tu piel.
Mi fuente de inspiración se ha ido,
mi razón para escribir ya no lo es
lentamente siento que me hundo en un vacío
en el cual no me quiero perder.
Amarte.
Buscaba tu abrazo,
quería estar en tu corazón,
ansiaba estar a tu lado
compartir contigo mis noches,
mis días,
mis alegrías
y sin sabores.
Adiós y buenas noches,
se ha terminado esta historia sin fin,
sin habernos pertenecido nunca,
sin haber compartido la vida
compartiendo solo momentos robados,
caricias lejanas y encuentros efímeros.
Ya nada tiene sentido sin tu presencia,
mi cuerpo extraña tu ausencia
desearía que nunca volvieras
y yo dejar de sentir esta impaciencia.
Impaciencia por extrañar  tu voz,
aquella que melosa me rogaba amarte.
Muero de ansias.
por sentirte nuevamente fundirnos
en una entrega insaciable.
Sentir el sudor de tu cuerpo,
llenarme de tu esencia y fundirme en tu piel.
Adiós y buenas noches, todo está dicho ya
No volveré a buscar tu charla.
No volveré a escuchar tu voz,
ni siquiera añorare tu recuerdo.
Esto ha terminado.
Y sólo te puedo decir.
Adiós.
Y buenas noches.
SAY PLUMA