martes, 5 de octubre de 2010

BAILARINA

Bailarina
Cual alondra te posas
liviana y frágil,
leve como la espuma sobre el
entarimado,
en tus ojos la música va dibujando estrellas,
te ves como la alondra
etérea e inconsútil.

Tu cuerpo va esculpiendo
efigies en el aire,
se despliega sensual hasta sus extramuros,
la tristeza aferrada a tus
brazos perfectos
resbala por tu espalda
y se aloja en tu talle.
Sonríes mientras danzas…
y el aire se detiene embelesado a mirarte.

Se demora la luz entre tus manos pálidas
alzadas en místico ademán…
Hay a tu alrededor
una hueste de hadas susurrando poesía.
Agoniza la música.
Comparece el silencio y se adueña del mundo.
Grácil y transparente
se derrumba tu cuerpo en las tablas gastadas,
Y entonces ciertamente
te asemejas a la alondra
adormecida en el nido.

Nahir Subelzú

2 comentarios:

  1. Gracias Diego por tus comentarios. Tomo nota de tus consejos, que espero me ayuden a mejorar, pero me cuesta un poco seguirlos, ¿quieres decir que las dos referencias a la alondra son las que sobran? ¿que el poema sería mejor sin la alondra? Es que te expresas poéticamente hasta en tus críticas, y no sé si te he entendido bien. Un saludo y gracias de nuevo.

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  2. Es verdad, tienes razón. Fíjate que no había reparado en eso, y mira que lo he leído y releído muchísimas veces... tiene unos diez años esta poesía. Gracias otra vez

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